Saludos, comandantes!Aquí os traigo un juego que sin duda podría ser un gran compañero de viaje este verano. Se trata de Un Imperio en Ocho Minutos, un juego publicado por Devir. Lo que tenemos entre manos es, a mi parecer, un juego realmente magnífico, no sólo por su precio (unos 15 euros), o por su tamaño (suficientemente pequeño para transportar fácilmente y lo suficientemente amplio para jugar a gusto), sino porque es muy sencillo, realmente fácil de aprender a jugar y con un componente estratégico bastante respetable para su estilo.
El juego consiste en ir controlando las diferentes regiones de un mundo ficticio empleando para ello unos cubos de madera del color de nuestra nación o equipo. Para realizar los movimientos usaremos unas cartas que iremos comprando, las cuales nos permitirán llevar a cabo diferentes acciones y, al mismo tiempo nos aportarán recursos que al final de la partida contaremos para calcular nuestros puntos de victoria.
Las partidas pueden durar unos 30 minutos más o menos. El diseño del juego es sencillo aunque bastante cuidado y visual. Resulta perfecto para introducir a jugadores más o menos noveles y también para pasar un rato entretenido sin necesidad de empantanarse en partidas largas y despliegues farragosos. Eso sí, puede llegar a ser muy competitivo.
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